ReinaValera(i)
14 Y como ellos llegaron al gentío, vino á él un hombre hincándosele de rodillas,
15 Y diciendo: Señor, ten misericordia de mi hijo, que es lunático, y padece malamente; porque muchas veces cae en el fuego, y muchas en el agua.
16 Y le he presentado á tus discípulos, y no le han podido sanar.
17 Y respondiendo Jesús, dijo: Oh generación infiel y torcida! ¿hasta cuándo tengo de estar con vosotros? ¿hasta cuándo os tengo de sufrir? traédmele acá.
18 Y Jesús le reprendió, y salió el demonio de él; y el mozo fué sano desde aquella hora.
19 Entonces, llegándose los discípulos á Jesús, aparte, dijeron: ¿Por qué nosotros no lo pudimos echar fuera?
20 Y Jesús les dijo: Por vuestra incredulidad; porque de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza, diréis á este monte: Pásate de aquí allá: y se pasará: y nada os será imposible.
21 Mas este linaje no sale sino por oración y ayuno.