JBS(i)
17 Y si algunas de las ramas fueron quebradas, y tú, siendo oliva silvestre, has sido injertado entre ellas, y has sido hecho participante de la raíz y de la grosura de la oliva;
18 no te jactes contra las ramas; y si te jactas, sabe que no sustentas tú a la raíz, sino la raíz a ti.
19 Dirás pues: Las ramas fueron quebradas para que yo fuera injertado.
20 Bien; por su incredulidad fueron quebradas, mas tú por la fe estás en pie. No te ensoberbezcas, antes teme.
21 Que si Dios no perdonó a las ramas naturales, a ti tampoco te perdonará.
22 Mira antes la bondad y la severidad de Dios; la severidad ciertamente en los que cayeron; mas la bondad (de Dios) en ti, si permanecieres en la bondad; pues de otra manera tú también serás cortado.
23 Y aun ellos, si no permanecen en incredulidad, serán injertados; que poderoso es Dios para volverlos a injertar.
24 Porque si tú eres cortado de la oliva que es silvestre por naturaleza, y contra natura fuiste injertado en la buena oliva, ¿cuánto más éstos, que son las ramas naturales, serán injertados en su oliva?