Psalms 39:3-9

SE(i) 3 Se enardeció mi corazón dentro de mí; en mi meditación se encendió fuego; y hablé con mi lengua: 4 Hazme saber, SEÑOR, mi fin, y cuánta sea la medida de mis días; sepa yo cuánto tengo de ser del mundo. 5 He aquí como a palmos diste a mis días, y mi edad es como nada delante de ti; ciertamente es completa vanidad todo hombre que vive. (Selah.) 6 Ciertamente en tinieblas anda el hombre; ciertamente en vano se inquieta; allega, y no sabe quién lo cogerá. 7 Y ahora, Señor, ¿qué esperaré? Mi esperanza en ti está. 8 Líbrame de todas mis rebeliones; no me pongas por escarnio del loco. 9 Enmudecí, no abrí mi boca; porque tú lo hiciste.