Proverbs 7:5-18

SE(i) 5 para que te guarden de la mujer ajena, y de la extraña que ablanda sus palabras. 6 Porque mirando yo por la ventana de mi casa, por mi celosía, 7 vi entre los simples, consideré entre los jóvenes, un joven falto de entendimiento, 8 el cual pasaba por la calle, junto a la esquina de aquella, e iba camino de su casa; 9 a la tarde del día, ya que oscurecía; en la oscuridad y tiniebla de la noche. 10 Y he aquí, una mujer que le sale al encuentro con atavío de ramera, guardada de corazón, 11 alborotadora y rencillosa, sus pies no pueden estar en casa; 12 unas veces de fuera, o bien por las plazas, acechando por todas las esquinas. 13 Y traba de él, y lo besa; desvergonzó su rostro, y le dijo: 14 Sacrificios de paz había prometido, hoy he pagado mis votos; 15 por tanto he salido a encontrarte, buscando tu rostro, y te he hallado. 16 Con paramentos he ataviado mi cama, recamados con cordoncillo de Egipto. 17 He sahumado mi cámara con mirra, áloes, y canela. 18 Ven, embriaguémonos de amores hasta la mañana; alegrémonos en amores.