Proverbs 4:4 Cross References - JBS

⁴ Y él me enseñaba, y me decía: Sustente tu corazón mis razones, guarda mis mandamientos, y vivirás.

¹⁹ Y respondió Dios: Ciertamente Sara tu mujer te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Isaac; y confirmaré mi pacto con él por alianza perpetua a su simiente después de él.

¹⁹ Porque yo lo he conocido, sé que mandará a sus hijos y a su casa después de sí, que guarden el camino del SEÑOR, haciendo justicia y juicio, para que haga venir el SEÑOR sobre Abraham lo que ha hablado acerca de él.

³ No haréis como hacen en la tierra de Egipto, en la cual morasteis; ni haréis como hacen en la tierra de Canaán, en la cual yo os introduzco; ni andaréis en sus estatutos. ⁴ Mis derechos pondréis por obra, y mis estatutos guardaréis, andando en ellos. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios. ⁵ Por tanto mis estatutos y mis derechos guardaréis, los cuales haciendo el hombre, vivirá en ellos. Yo soy el SEÑOR.

⁹ Por tanto, guárdate, y guarda tu alma con diligencia, que no te olvides de las cosas que tus ojos han visto, ni se aparten de tu corazón todos los días de tu vida; y las enseñarás a tus hijos, y a los hijos de tus hijos.

⁶ Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón;

¹¹ Ahora pues, hijo mío, sea contigo el SEÑOR, y seas prosperado, y edifiques Casa al SEÑOR tu Dios, como él ha dicho de ti. ¹² Y el SEÑOR te dé entendimiento y prudencia, y él te dé mandamientos para Israel; y que tú guardes la ley del SEÑOR tu Dios. ¹³ Entonces serás prosperado, si guardares para hacer los estatutos y derechos que el SEÑOR mandó a Moisés sobre Israel. Esfuérzate pues, y cobra ánimo; no temas, ni desmayes. ¹⁴ He aquí, yo en mi estrechez he preparado para la Casa del SEÑOR cien mil talentos de oro, y un millar de millares de talentos de plata; no tiene peso el bronce ni el hierro, porque es mucho. Asimismo he preparado madera y piedra, a lo cual tú añadirás. ¹⁵ Tú tienes contigo muchos oficiales, canteros, albañiles, y carpinteros, y todo hombre experto en toda obra. ¹⁶ Del oro, de la plata, del bronce, y del hierro, no hay número. Levántate pues, y a la obra; que el SEÑOR será contigo.

⁹ Y tú, Salomón, hijo mío, conoce al Dios de tu padre, y sírvele de corazón perfecto, y de ánimo voluntario; porque el SEÑOR escudriña los corazones de todos, y entiende toda imaginación de los pensamientos. Si tú le buscares, lo hallarás; mas si le dejares, él te desechará para siempre.

¹¹ En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti.

¹ ¶ Hijo mío, no te olvides de mi ley; y tu corazón guarde mis mandamientos;

² Guarda mis mandamientos, y vivirás; y mi ley como las niñas de tus ojos.

⁶ ¶ Instruye al niño en su carrera; aun cuando fuere viejo no se apartará de ella.

³ Inclinad vuestros oídos, y venid a mí; oíd, y vivirá vuestra alma. Y haré con vosotros pacto eterno, las misericordias firmes a David.

⁵⁰ Y sé que su mandamiento es vida eterna; así que, lo que yo hablo, como el Padre me lo ha dicho, así hablo.

⁴ Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos; sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor.

⁵ trayendo a la memoria la fe no fingida que está en ti, la cual residió primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice; y estoy cierto que está en ti también.

¹⁵ y que sabes las Sagradas Escrituras desde la niñez, las cuales te pueden hacer sabio para la salud por la fe que es en Cristo Jesús.

⁹ en la cual consumado, fue hecho causa de eterna salud a todos los que le oigan;