Proverbs 10:21 Cross References - JBS

²¹ Los labios del justo apacientan a muchos; mas los locos con falta de entendimiento mueren.

³ He aquí, tú enseñabas a muchos, y las manos debilitadas corroborabas. ⁴ Al que vacilaba, enderezaban tus palabras, y las rodillas de los que arrodillaban esforzabas.

¹² Del mandamiento de sus labios nunca me separé; guardé las palabras de su boca más que mi comida.

²¹ Me oían, y esperaban; y callaban a mi consejo. ²² Tras mi palabra no replicaban, mas mi razón destilaba sobre ellos.

³⁰ Pe La boca del justo hablará sabiduría; y su lengua proferirá juicio.

²⁹ por cuanto aborrecieron el conocimiento, y no escogieron el temor del SEÑOR,

³¹ Comerán, pues, del fruto de su camino, y de sus consejos se hartarán.

¹² y digas: ¡Cómo aborrecí el castigo, y mi corazón menospreció la reprensión;

²³ El morirá por no haberse sometido al castigo; y por la grandeza de su locura, errará.

¹⁸ ¶ Hay quienes hablan como dando estocadas de espada; mas la lengua de los sabios es medicina.

⁴ ¶ La sana lengua es árbol de vida; mas la perversidad en ella es una brecha en el espíritu.

¹⁶ ¶ ¿De qué sirve el precio en la mano del loco para comprar sabiduría, no teniendo corazón para entender?

⁹ Y cuanto más sabio fue el Predicador, tanto más enseñó sabiduría al pueblo; e hizo escuchar, e hizo escudriñar, y compuso muchos proverbios. ¹⁰ Procuró el Predicador hallar palabras de voluntad, y escritura recta, palabras de verdad.

¹⁵ Y os daré pastores según mi corazón, que os apacienten con ciencia y con inteligencia.

¹⁶ Se hallaron tus palabras, y yo las comí; y tu palabra me fue por gozo y por alegría de mi corazón; porque tu nombre se llamó sobre mí, oh SEÑOR Dios de los ejércitos.

⁶ Mi pueblo fue talado, porque le faltó sabiduría. Porque tú desechaste la sabiduría, yo te echaré del sacerdocio; y pues que olvidaste la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos.

¹⁹ Oyendo cualquiera la Palabra del Reino, y no entendiéndola, viene el Malo, y arrebata lo que fue sembrado en su corazón; éste es el que fue sembrado junto al camino.

¹⁹ Y esta es la condenación: porque la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz; porque sus obras eran malas. ²⁰ Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece a la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean redargüidas.

¹⁵ ¶ Y cuando hubieron comido, Jesús dijo a Simón Pedro: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas más que éstos? Le dice: Sí Señor; tú sabes que te amo. Le dice: Apacienta mis corderos. ¹⁶ Le vuelve a decir la segunda vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Le responde: Sí, Señor; tú sabes que te amo. Le dice: Apacienta mis ovejas. ¹⁷ Le dice la tercera vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Se entristeció Pedro de que le dijera la tercera vez: ¿Me amas? Y le dice: Señor, tú sabes todas las cosas; tú sabes que te amo. Le dice Jesús: Apacienta mis ovejas.

²⁸ Y como a ellos no les pareció tener a Dios en cuenta, Dios los entregó a perverso entendimiento, para que hicieran lo que no conviene,

² Apacentad la manada de Dios que está entre vosotros, teniendo cuidado de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia vergonzosa; sino con ánimo pronto;